Uno de los pilares más importantes para ayudar a tener una mascota saludable es brindarle una alimentación adecuada. El aporte equilibrado en la dieta de un perro o de un gato de nutrientes y de energía no solo permite saciar su apetito sino que es vital para el desarrollo y mantenimiento correctos de su organismo y para colaborar con la prevención de algunas enfermedades. Por eso al momento de elegir el tipo de alimento más adecuado para un perro o un gato existen varias cuestiones que deben considerarse previamente.
Completo y balanceado
Se considera que un alimento es completo cuando su fórmula contiene todos los nutrientes esenciales, en cantidad y calidad, que necesita una mascota para mantenerse saludable. Estos nutrientes son cinco: proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas, minerales y agua. La cantidad mínima de cada uno de ellos que debe estar presente en la dieta de un perro o un gato, adulto o en crecimiento, está establecida por organismos de contralor referentes a nivel mundial.
Cuidado con las sobras
Algunas personas acostumbran a alimentar a sus mascotas con las sobras de su propia comida, mezcladas con algún otro ingrediente para aumentar su volumen. Esto tiene serios riesgos para la salud del animal ya que estas preparaciones caseras difícilmente puedan cubrir en forma equilibrada todos sus requerimientos nutricionales y, además, es muy complicado calcular qué cantidad debe consumir por día para estar nutrida en forma balanceada. Hay que tener presente que las necesidades de energía y de nutrientes que tiene un animal no son iguales siempre, sino que se modifican según una serie de factores como la edad, el nivel de actividad física, el estado reproductivo, la temperatura ambiente, entre otros. Tanto el déficit como el exceso de un componente de la dieta pueden predisponer a padecer enfermedades.
Otro inconveniente de alimentar a una mascota con preparaciones caseras es la limpieza del hogar, ya que los animales así alimentados en general eliminan mayor cantidad de materia fecal, que es menos sólida y de olor más fuerte.
La correcta conservación del alimento casero también es otro inconveniente ya que lo que pudiera quedar de comida al cabo del día, en particular en los meses de calor, debería descartarse para evitar problemas por descomposición del alimento o por la invasión de insectos.
El tiempo y costos que demandan la compra de materias primas y su preparación son factores que tampoco juegan a favor de los alimentos caseros.
Dieta completa y balanceada
Afortunadamente, para que la alimentación diaria de una mascota no sea un problema, existen distintos productos comerciales balanceados que están formulados por especialistas para cubrir en forma completa y equilibrada cada uno de los requerimientos del animal según la edad, tamaño corporal, nivel de actividad física e incluso, en algunos casos, para ayudar a prevenir ciertos trastornos específicos de la salud.
Fruto de investigaciones científicas, estos alimentos están desarrollados para incrementar el aprovechamiento de sus nutrientes y para ajustarse a las necesidades puntuales de cada animal en una situación determinada. Al estar equilibrados todos sus componentes, es mucho más fácil determinar la ración diaria que debe consumir un animal, que por otro lado ya viene sugerida en la información de la bolsa.
Pero no todos estos productos son de igual calidad nutricional. El propietario de una mascota debe consultar detenidamente la información técnica que proveen las empresas acerca de la composición de sus alimentos balanceados.
En este sentido, el asesoramiento veterinario es de gran ayuda para decidir qué productos son los más adecuados para mantener a una mascota bien nutrida y saludable.